Jacobo II de Escocia
Hijo de Carlos I y de Enriqueta María de Borbón, ascendió al trono de Inglaterra tras la muerte de su hermano Carlos II. El Parlamento no admitió su conversión al catolicismo en el año 1672 pero el rey consideró que podía gobernar de espaldas a él. Puso en marcha una intensa política de restauración católica, enviando una embajada a Roma, realizando diversos honores al nuncio apostólico o elaborando las "Declaraciones de Indulgencias" de los años 1687 y 1688. Esta política provocó violentas reacciones que fueron contundentemente reprimidas en un primer momento. La intervención de Guillermo de Orange, desembarcando en Inglaterra el 15 de noviembre de 1688, trajo un cambio en la situación ya que el de Orange fue acogido de manera triunfal por los sublevados. Jacobo decidió abandonar el país en enero de 1689 para refugiarse en Francia, rodeado de un grupo de fieles denominados "jacobistas". Realizó una ligera tentativa de recuperar el poder al año siguiente, pero al no conseguir ningún resultado positivo, decidió permanecer en el destierro francés hasta su fallecimiento.
Enciclopedia Universal.
2012.