Cubos pequeños, marcados en cada cara con puntos que van de uno a seis, utilizados en diversos juegos sociales y de apuestas.
Después de agitados, se lanzan los dados sobre una superficie plana. La suma de los puntos de la cara superior decide, según las reglas del respectivo juego, si el lanzador (o "tirador) gana, pierde o sigue lanzando. En muchos juegos de salón, los dados determinan las jugadas de cada participante. Los dados, cuyos orígenes se remontan a la prehistoria, fueron en muchas culturas instrumentos mágicos para echar suertes y adivinar el futuro. En la era moderna se utilizan en diversos juegos de azar, entre ellos el craps.
Enciclopedia Universal. 2012.