(1926–89).
Período de la historia de Japón correspondiente al reinado de Hiro-Hito, el emperador Showa. Las primeras décadas del período se caracterizaron por el ascenso del militarismo en la década de 1930 y por la desastrosa participación japonesa en la segunda guerra mundial, cuyo resultado fue el completo colapso del país y, finalmente, su rendición. La época de posguerra fue un tiempo de reconstrucción, durante la cual Japón se integró a la ONU (1956), fue anfitrión de los Juegos Olímpicos de verano (1964) y realizó la Exposición Internacional de Osaka en 1970. Japón experimentó el llamado "milagro económico, registrando una tasa de 10% de crecimiento anual en 1955–60, cifra que se elevó en los años siguientes. En la década de 1980, la economía japonesa se convirtió en una de las más importantes y sofisticadas del mundo, con un ingreso per capita superior al de EE.UU. La sociedad se hizo cada vez más urbana, y hacia mediados de la década el 10% de la población se había concentrado en Tokio. La cultura popular fue muy influenciada por EE.UU.; la juventud nipona imitó a sus pares estadounidenses de diversas maneras. Entre los cambios sociales de la era Showa se cuentan el incremento de las familias nucleares (por sobre las extendidas), de las parejas que contraen matrimonio por amor (en lugar de los matrimonios concertados), de las familias con menos hijos, y de mayores oportunidades para las mujeres. See also período Heisei; ocupación de Japón.
Enciclopedia Universal. 2012.