A medida que se debilitaba el poder de Asiria sobre Israel, Josías montó una campaña contra los cultos foráneos y mandó sacar sus altares e ídolos del Templo. Preconizó el retorno a la observancia de la ley mosaica, basada en el libro de la Ley descubierto en el templo de Jerusalén ( 622 BC), que se cree es el mismo que el código jurídico del Libro del Deuteronomio. Fueron destruidos los santuarios rurales y los cultos de fertilidad y la adoración a Yahvé (el Dios de Israel) se centralizó en Jerusalén.
Enciclopedia Universal. 2012.